La palabra artrópodo proviene del griego y significa pies articulados. Constituyen el filo más numeroso y diverso
del reino animal. El término se aplica a animales invertebrados dotados de un esqueleto externo y apéndices articulados, incluye, entre otros,
insectos, arácnidos, crustáceos y miriápodos.
Características generales de los artrópodos
- Se los denomina de esta manera por estar provistos de patas articuladas. En realidad no son sólo las patas, sino todo el cuerpo el que está formado por 2 o 3 segmentos unidos entre sí por medio de articulaciones. En número de patas varía también según el tipo de artrópodo.
- Presencia de un esqueleto externo o exoesqueleto quitinoso que mudan periódicamente. El exoesqueleto de los artrópodos es una cubierta llamada cutícula que les hace ser fuertes y resistentes. La cutícula aparece muy frecuentemente cubierta de quetas (pelos) de diversa función, incluida la sensorial táctil.
- El esqueleto externo tiene una desventaja y es que, para poder crecer, el animal debe desprenderse de él. Lo hace en un proceso, controlado hormonalmente, de muda. Hasta que no se endurece esta nueva cubierta el animal está relativamente indefenso, con menos posibilidad de escapar o resistirse.
- Para los apéndices el exoesqueleto aporta tubos huecos articulados. Se llama artejos a las piezas articuladas que forman los apéndices.
- Los apéndices de la cabeza están adaptados para la percepción sensorial, la defensa y para manipular los alimentos; los del tórax sirven para andar y nadar; los abdominales cumplen funciones respiratorias y reproductoras, como retener los huevos o aferrarse a la pareja durante la cópula.
- La mayoría de los artrópodos están dotados de ojos, de los que existen varios modelos distintos. Los ojos simples son cavidades esferoidales con una sencilla retina y cubiertos frontalmente por una córnea transparente. Su rendimiento óptico es muy limitado, con la excepción de los grandes ojos de algunas familias de arañas. Los ojos compuestos están constituidos por múltiples elementos de manera que cada uno apunta en una dirección diferente y entre todos cubren un ángulo de visión más o menos amplio.
- Distribuidos por todo el cuerpo, pueden encontrarse sensilias, que son receptores sensibles a los estímulos químicos, como los del gusto o el olfato, y receptores táctiles, asociado a antenas y palpos. Algunos insectos disponen de un sentido del oído y muchos son sensibles a las vibraciones del suelo, por las que detectan la presencia de presas o depredadores.
- Los artrópodos suelen estar dotados de sensores de posición, sencillos pero eficaces, que les ayudan a mantener la posición y el equilibrio.
- Siempre se reproducen sexualmente. La reproducción es interna y son ovíparos. Las hembras, tras ser fecundadas por los machos, ponen huevos. El desarrollo, a partir del huevo, puede ser directo o indirecto. En el desarrollo directo nace un individuo similar al adulto, aunque, como es lógico, de menor tamaño. En el desarrollo indirecto nace una larva que implica una serie de cambios profundos denominados metamorfosis.
- Cuidado Parental: Los padres se encargan de incubar los huevos y cuidar las crías.
- Viven en todos los medios, aéreos, acuáticos y terrestres.
Clasificación de los artrópodos
Los artrópodos se pueden dividir principalmente en:
- Insectos
- Arácnidos
- Crustáceos
- Miriápodos
1. Insectos
- Los insectos comprenden el grupo de animales más diverso de la Tierra, con aproximadamente 1 millón de especies descritas. Representarían más del 90 % de las formas de vida del planeta. Se estima que hay 200 millones de insectos por cada ser humano.
- La ciencia que estudia los insectos se denomina entomología.
- Los insectos pueden encontrarse en casi todos los ambientes del planeta, aunque solo un pequeño número de especies se ha adaptado a la vida en los océanos.
- Se caracterizan por presentar un par de antenas, tres pares de patas y dos pares de alas (que, no obstante, pueden reducirse o faltar).
- El cuerpo de los insectos está formado por tres regiones principales (denominadas tagmas): cabeza, tórax y abdomen, uniformemente recubiertas por un exoesqueleto.
- La cabeza es la región anterior del cuerpo, en forma de cápsula, que contiene los ojos, antenas y piezas bucales.
- La mayoría de los insectos tienen un par de ojos compuestos relativamente grandes, localizados dorso-lateralmente en la cabeza. En adición a los ojos compuestos, la mayoría de los insectos posee tres ojos simples, u ocelos, localizados en la parte superior de la cabeza, entre los ojos compuestos.
- Las antenas son apéndices móviles multiarticulados. El cometido de las antenas es eminentemente sensorial, desempeñando varias funciones. La función táctil es la principal, gracias a los pelos táctiles que recubren casi todos los antenómeros; también desempeñan una función olfativa y una función auditiva y a veces una función prensora durante la cópula, al sujetar a la hembra.
- Las piezas bucales son piezas móviles que se articulan en la parte inferior de la cabeza, destinadas a la alimentación; trituran, roen o mastican los alimentos sólidos o duros y absorben líquidos o semilíquidos. Las piezas bucales incluyen los Labros (labio superior o labio simple), las maxilas y las mandíbulas.
- Tipo masticador. En este tipo de aparato bucal los apéndices son esencialmente las mandíbulas, las maxilas y el labio. El aparato bucal de tipo masticador es el más generalizado entre los insectos.
- Tipo cortador-chupador. las mandíbulas se presentan en forma de hojas afiladas y las maxilas en forma de largos estiletes sonda.
- Tipo chupador o lamedor. Un gran número de moscas no picadoras, entre ellas la mosca doméstica, tienen este tipo de aparato bucal adaptado sólo para la ingestión de alimentos líquidos o fácilmente solubles en saliva.
- Tipo masticador-lamedor. Este tipo de aparato bucal, adaptado a la absorción de líquidos, se encuentra en las abejas y avispas, ejemplificado por la abeja común.
- Tipo picador-chupador. El aparato bucal de muchos grupos de insectos está modificado para taladrar tejidos y chupar jugos, como los piojos y las pulgas.
- Tipo tubo de sifón. Los lepidópteros adultos se alimentan de néctar y otros alimentos líquidos. Éstos son succionados por medio de una larga probóscide (espiritrompa) compuesta solamente por un tubo que desemboca en el esófago.
- Las alas de los insectos son también importantes para producir ciertos sonidos, para dispersar olores y, por su diseño, tienen importancia en el camuflaje y el mimetismo.
- La mayoría de las especies de insectos tienen sexos separados, morfológicamente diferenciados entre sí, y deben aparearse para reproducirse. No obstante, además de este tipo de reproducción sexual, existen especies que pueden reproducirse sin aparearse e, incluso, éste puede ser el proceso típico de reproducción en varias de ellas. Estas especies se denominan partenogenéticas y su tipo de reproducción es eminentemente asexual.
- La mayoría de las especies de insectos ponen huevos (son ovíparas). Muchos insectos ponen sus huevos en las raíces, o en los brotes y tejidos tiernos de las plantas, o dentro de los granos de los cereales e incluso, dentro de otros animales. El lugar donde los insectos deponen los huevos, si bien variado, no es de ningún modo aleatorio. El objetivo de escoger cuidadosamente el lugar de la puesta es siempre el mismo: poner los huevos en el lugar dónde las larvas recién nacidas estén rodeadas de alimento. A veces constituyen verdaderas plagas que causan grandes daños económicos.
El régimen alimenticio de los insectos es sumamente variado.
A grandes rasgos pueden diferenciarse los siguientes:
- Fitófagos. Se alimentan de todo tipo de productos vegetales y muchas veces causan plagas en los cultivos: Filófagos los comedores de hojas, Xilófagos los consumidores de madera donde excavan galerías, granívoros los que comen grano y otras semillas, carpófilos, que comen polen y néctar y poseen piezas bucales especializadas para tal fin y rizófagos los que comen frutos o raíces. Diversas especies de insectos son micetófagos y viven sobre hongos, alimentándose de sus hifas y esporas.
Gusanos de seda (larvas de mariposa) Termitas
- Zoófagos. Los carnívoros pueden alimentarse de presas vivas que ellos mismos capturan o bien de sus fluidos, como la sangre. En esta categoría debe también contemplarse los parásitos, tanto ectoparásitos, que se alimentan desde el exterior (pulgas, chinches), como los endoparásitos, que penetran en el interior de sus hospedadores.
- Omnívoros. Tienen un régimen alimentario variado, tomando todo tipo de productos vegetales y animales.
- Saprófagos o descomponedores. Se alimentan de materia orgánica, animal o vegetal, en descomposición. Entre ellos destacan los necrófagos, que descomponen cadáveres, los saproxilófagos que comen madera en descomposición, y los coprófagos que reciclan los excrementos.
- Los insectos comensales aprovechan el alimento sobrante o las descamaciones, mudas, excrementos, etc.; de su hospedador, al que no perjudican. Los hormigueros y termiteros alojan muchos insectos comensales, donde en general se alimentan de la comida almacenada.
- El mutualismo, en que dos especies obtienen beneficio mutuo de su relación, está también presente entre los insectos; muchas hormigas apacientan pulgones, a los que defienden de otros insectos y obtiene a cambio un líquido azucarado que los pulgones segregan. La polinización puede también considerarse como mutualismo entre insectos y vegetales.
- El parasitismo está también muy extendido entre los insectos; en este caso, el hospedador sale perjudicado por el parásito como pulgas, piojos, chinches.
Defensa de los insectos. La reacción más común frente a un peligro es la huida.
- Algunos insectos se defienden produciendo secreciones repugnatorias (malolientes, irritantes, etc...)
- Mediante actitudes intimidatorias (como las mantis que levantan sus patas delanteras y muestran sus alas posteriores de colores llamativos) o inmovilización refleja.
- Otros inoculan substancias tóxicas mediante sus piezas bucales.
- Algunas larvas de lepidópteros poseen pelos urticantes que se clavan en la boca de sus enemigos.
- Muchos insectos tóxicos o picadores poseen coloraciones vistosas y llamativas que advierten a sus depredadores potenciales de su peligrosidad; este fenómeno es conocido como aposematismo.
- Los insectos son los maestros indiscutibles de la cripsis, adaptación que consiste pasar inadvertido a los sentidos de otros animales. Son extraordinarias las morfologías que imitan objetos del entorno, como en los insectos palo e insectos hoja). Muchos insectos imitan los colores de su entorno (homocromía), lo que se acompaña con frecuencia de una inmovilización refleja ante situaciones de peligro.
¿Puedes encontrar la mantis religiosa camuflada?
- Los insectos constituyen una de las clases de animales que más interrelacionados se hallan con las actividades humanas. Desde los insectos útiles que nos proveen miel o seda hasta los insectos que son venenosos o transmisores de enfermedades mortales, existe un sinnúmero de especies que se hallan directa o indirectamente asociadas al ser humano.
- Polinización. Las plantas, por su condición de organismos sésiles, necesitan que sus gametos masculinos (los granos de polen) sean transportados de una planta a otra para que pueda ocurrir la polinización y éste transporte está a cargo de diversas especies de insectos. La planta necesita atraer a los insectos a sus flores para que éstos se cubran de granos de polen, los que más tarde serán transportados a otras plantas. Para atraerlos hacen uso del color de los pétalos y la fragancia de sus flores, si bien el más importante de todos ellos es el alimento que pueden proveerles: el néctar, utilizado como "recompensa" por su función.
- Muchas especies de insectos que se alimentan de sangre son transmisores de enfermedades infecciosas graves para el ser humano, tales como el paludismo, la enfermedad del sueño, la fiebre amarilla, el dengue, tifus y la peste bubónica.
2. Arácnidos
Los arácnidos incluyen formas tan conocidas como las arañas, las garrapatas, los
escorpiones y los ácaros. Son el segundo grupo más numeroso del reino animal, después de los insectos, y casi dobla en especies a los vertebrados.
- El cuerpo posee dos regiones o tagmas más o menos diferenciados, cefalotórax y abdomen.
- Junto a la boca tienen un par de pedipalpos, a veces muy desarrollados y cuatro pares de patas locomotoras.
- Carecen de antenas, y suelen tener uno o más pares de ojos simples, en lugar de grandes ojos compuestos como los insectos. En algunos casos esos ojos son muy eficaces para su tamaño.
- Se alimentan succionando líquidos más que tragando porciones sólidas, para lo cual a menudo realizan una predigestión externa secretando o inyectando enzimas digestivas sobre el alimento. Son a menudo depredadores, y varios grupos inyectan veneno.
- La excreción, como es típico de animales que normalmente no beben y a veces crecen en ambientes áridos, produce una orina muy concentrada o seca.
- Los arácnidos son ovíparos (se reproducen mediante huevos) pero algunas especies nacen directamente de la madre (ovovivíparos). El comportamiento de cortejo es a menudo muy elaborado, y en muchos casos se observa cuidado parental, un rasgo raro fuera de los vertebrados.
- Son más abundantes y variados en climas cálidos, pero están presentes en todos los climas no polares, y entre las arañas y los pseudoescorpiones se encuentran algunos de los pocos animales capaces de vivir en las cumbres más altas de la Tierra.
3. Crustáceos
Incluyen varios grupos de animales como las
langostas, los camarones, los cangrejos, los langostinos y los percebes. Los
crustáceos son fundamentalmente acuáticos y habitan en todas las profundidades. Los crustáceos
son uno de los grupos zoológicos con mayor éxito biológico, dominan
los mares, como los insectos dominan la tierra.
- A la ciencia que estudia a los crustáceos se la conoce como carcinología.
- El cuerpo está dividido normalmente en tres tagmas o regiones: cabeza, tórax y abdomen, aunque normalmente los primeros segmentos del tórax se unen a la cabeza formando lo que se conoce como cefalotórax.
- Poseen 5 pares de apéndices o patas y 2 pares de antenas.
Los apéndices de los crustáceos, a pesar de su gran
diversidad, responden a dos tipos estructurales básicos:
- Hay algunos alargados, cilíndricos, robustos, con tegumento duro y bien articulados entre sí. Son las típicas patas marchadoras. Otros son aplanados y con articulaciones poco marcadas. Sus funciones principales son la natación y el intercambio de gases.
- El tórax en muchos crustáceos esta cubierto por el caparazón.
4. Miriápodos
Los
miriápodos son artrópodos mandibulados, similares a
los insectos en algunos aspectos, pero con muchos caracteres que los
diferencian de éstos. Comprenden cuatro grupos bien clasificados, los ciempiés,
milpiés, paurópodos, y sínfilos, todos terrestres.
Ciempiés o escolopendra Milpiés
- Todos tienen en común un cuerpo compuesto por dos regiones; cabeza y tronco, éste es largo y está formado por muchos segmentos y multitud de pares de patas (Illacme plenipes, un diplópodo de California ostenta el récord, con 375 pares de patas).
- En algunos de ellos el par de patas más cercano a la cabeza está modificado y hace las funciones aguijones inoculadores de veneno.
- La cabeza lleva las antenas. Los ojos son simples, aunque en algunos grupos se reúnen cientos de ellos y forman un falso ojo compuesto. Las piezas bucales tienen una estructura básica similar a la de los insectos . Las mandíbulas están presentes en todos los grupos de miriápodos.
- Los miriápodos tienen sexos separados y son ovíparos. La inseminación es en muchos casos indirecta; los machos depositan los espermatóforos en las inmediaciones de la hembra, que los recoge y almacena.
- La mayoría de los miriápodos son lucífugos (huyen de la luz) e higrófilos (buscan la humedad). Por ello, muchos son nocturnos, y se refugian durante el día bajo piedras, entre la hojarasca, en troncos en descomposición, entre el musgo, etc. Algunos son depredadores agresivos y activos; el resto son principalmente herbívoros y muchos son detritívoros.